Francisca Serrano
CEO en www.tradingybolsaparatorpes.com
Autora de “Mueve tus ahorros y Gánate un sueldo” e “Hijo Rico, Hijo Pobre”.
“Hijo Rico, Hijo Pobre” ¿Cuánto afecta la educación financiera en la infancia a la futura libertad económica?
Desde mi punto de vista… ¡Toda! Tal vez por ello escribí un libro con el nombre de este articulo: “Hijo Rico, Hijo Pobre”. Navidad es época de regalos y los más pequeños; y también los adolescentes, se encuentran con un dinero llovido del cielo. Los niños no suelen percatarse de nuestros problemas económicos; especialmente cuando son muy pequeños, pero saber gestionar su paga y ahorrarla debería formar parte de la educación que les den sus padres. Lamentablemente la escuela no te enseña y adquirimos muchos hábitos de nuestros progenitores. Sin embargo es conveniente; adaptándonos a la edad de nuestro hijo, empezar a hablarles de dinero para que lo valoren correctamente generando una buena relación con lo que nuestros abuelos llamaban “el parné”.
¿Cómo educarles? La paga seguramente sea su primer contacto con el dinero. Sirve para organizar su economía y hacer frente a sus gastos. Explicarles como llega el dinero al cajero y que trabajamos por él, debe ser de las primeras charlas a mantener con nuestros hijos. El dinero suele venir del trabajo, aunque otro viene de las rentas o inversiones. Tienen que tener claro que es limitado y por ello en una época como la Navidad; no podemos gastarlo todo, incluso dividiendo la cantidad recibida, podremos tener para otras necesidades o caprichos más adelante.
Ventajas: Aprenderán a planificar sus gastos en base a la paga semanal que reciben y dando al dinero su justo valor.
Inconveniente: Los padres no suelen hablar de dinero por “tabú” o creencias limitantes contra el mismo, la mayoría de los casos por incultura financiera.
Claves:
Consejo 1: Tener una hucha dividida en compartimentos para gastarla en ocio, ahorro, inversión y dar a otros. Enseñará a un niño y más tarde a un adolescente que saber ahorrar e invertir tiene sus ventajas futuras, sobre todo si desde joven se conoce el valor del Interés Compuesto aplicado al ahorro.
Consejo 2: Hablarles con ejemplos reales. El parque Micropolix de Madrid es un ejemplo de cómo jugando un niño puede aprender un oficio; ganar sus eurix, para administrar y gastar como consideré oportuno. Este podría ser un gran regalo de Navidad para disfrutar en familia. Los juegos como el Monopoly aportan conocimiento disfrutando.
Consejo 3: Abrirles una cuenta de ahorro para que rompan el cerdito hucha con sus padres y lleven su dinero al banco. Ese día celebrarlo toda la familia con una comida especial en casa. El niño-adolescente jamás olvidará que el ahorro es bueno, por su recuerdo de la infancia. Los buenos hábitos se adquieren.
Opinión Personal: No hablar de dinero forma parte de una creencia limitante. Fechas como la Navidad pueden ser motivo de disputa económica en la familia. Sembrar el ejemplo en nuestros hijos con nuestro proceder; y una educación financiera desde la infancia, para mí es el mejor legado que podemos darle. Que puedan estudiar lo que amen sin que el dinero sea ningún problema. Por ese motivo recomiendo leer libros de educación financiera a los padres sin ella.
Frase del mes:
“No hablar a nuestros hijos de dinero es una creencia limitante”
@Fca_Serrano