Sanchez Drago en el Foro de Encuentros Culturales en Marbella:

 

«El elixir de mi eterna juventud es tener sexo varias veces al dia»

 

Amparo de la Gama.

 

Fernando Sánchez Dragó acaba de cumplir 81 años “y fíjate como estoy, hecho un chavalín, enamorado hasta el tuétano y practicando sexo más que nunca”. El autor acaba de publicar en Planeta ‘Shangri-La, el elixir de la eterna juventud’, una fórmula personal e intransferible. Los escépticos se quejan, pero él dice que le funciona.

Así arranca en una entrevista concedida a Encuentros en la que el escritor nos presenta a su nueva novia, Laura Celeiro. Han pasado unos días en Marbella con motivo de la inauguración de la clínica Neolife en la Milla de Oro de la ciudad malagueña, de la que es imagen. Sánchez Dragó y Laura pasean su amor por toda España. Hace unos días posaban en el photocall del Premio Planeta: “Yo voy donde vaya Fernando”, desvela a Vanitatis la gallega. «He dejado todo para estar con él. Me apasiona escuchar sus conferencias y compartir cada espacio y minuto de su vida», añade.

La historia de amor con su jovencísima novia arranca hace pocos meses. Todo comenzó cuando Laura, desde Valencia, vio el programa de Risto Mejide en el que participaba el escritor:

 

Amor a primera vista

 

“Le vi en la entrevista que le hicieron y me enamoré de él. Yo ya le admiraba hace mucho tiempo pero verle en ese ‘chester’ y con esa puesta en escena me hizo decidirme a contactar con él”, confiesa ella. “Y aquí estamos -continúa Sánchez Dragó-. Empezamos a escribirnos mails hasta que quedamos y cuando yo la tuve a cinco centímetros de mí, me agarró el corazón. Laura es preciosa. Dejó Valencia y ahora vivimos juntos en Madrid”.

 

Y es que la diferencia de edad con sus parejas nunca ha sido un impedimento para el literato. “Las más jóvenes que han pasado por mi vida tenían veinte años. La primera la conocí aquí, en Torremolinos, cuando escribí mi libro ‘El dorado’ y la segunda era alumna mía y madre de mi hijo pequeño. Son estúpidos los que piensan que la edad cronológica puede condicionarte en algo”.

Las frases de ‘Chester in love’ que cautivaron a Laura

 

El programa de ‘Chester in love’ pasará a los anales de la biografía de Sánchez Dragó como la ventana por donde se asomó para que le conociera Laura Celeiro gracias a frases como: “Hay que darse cuenta de que el órgano sexual no está en la entrepierna sino en la cabeza” y “es fundamental encontrar la pareja adecuada” o “las mujeres en el sexo son inagotables, los que nos agotamos somos nosotros aunque alguna mujer sé que sí se ha agotado conmigo”.

 

El escritor reflexionó sobre el sexo

 

 

Laura es gallega, pero vivía en Valencia cuando empezó su relación con el escritor. Ha trabajado de comercial en diferentes empresas, como Melisofi Consulting y Renault. Esta faceta de la pareja de Sánchez Dragó puede ser muy rentable para la parcela empresarial que ahora lleva a cabo con sus “píldoras afrodisíacas”.

 

El escritor se embarca ahora en una nueva aventura sacando al mercado Despacito. “Sí -explica a Vanitatis-, son unas píldoras afrodisíacas y de composición natural que servirán para ralentizar la eyaculacion precoz. Las que yo tomo ahora, que también son de mi línea ‘Elixir de la juventud’ son las Homo Erectus, el secreto de mi excelente vida sexual”.

 

El premio Planeta se jacta de una gozosa actividad sexual y quiere compartir su secreto con el mundo entero: “¿Cariño, a que no te quejas de mí en la cama?”. Le pregunta a su joven novia con ironía y ella le dice que no con un beso. «Nunca había hecho el amor más veces ni durante más tiempo ni mejor que como lo hago ahora y es que me tomo cuarenta pastillas al día. Tengo los índices de testosterona de un chavalín como te digo”. Laura no toma aún de nada “porque no lo necesita”.

 

 

 

Los cuentos a Akela

 

A sus 81 años, a Sánchez Dragó no le falta de nada: “Tengo amor, salud de hierro a pesar de los cuatro bypass coronarios y una familia con cuatro hijos que va desde mi primogénito de cincuenta y ocho años al menor, Akela, de cinco años”. El pequeño, de rasgos asiáticos, dice que se parece mucho a él: “Lo que más me apasiona es acostarle y contarle cuentos que le invento. Algún día escribiré sobre las nietas de Wendy de Peter Pan y se lo dedicaré”.