(Amparo de la Gama) El duque de Sevilla, Francisco de Borbón llega el próximo 2 de marzo al Foro de Encuentros con la Cultura con su libro de memorias, ‘Cuasi memorias’, en el que relata sus vivencias, y sus momentos más intensos se define como: “Una persona que siempre intentó cumplir con su deber y trató de llevar el nombre de España dondequiera que vivió”. En esta etapa de su vida su tiempo transcurre entre Madrid y Marbella. Le apasionan estar con sus hijos y sus nietos, pasear por el mar, hacer vela, el mismo cuenta que ha cruzado dos veces el océano Atlántico en un velero, el esquí, el polo, la arqueología y el arte.
Llevar con honor el titulo
Llevar el título de duque de Sevilla, es una gran responsabilidad para Francisco de Borbón: “Soy muy consciente de que todos los que lo llevemos tenemos la obligación de mantenerlo limpio, pues es un patrimonio de la familia y al llevarlo durante una vida, cuando pase al siguiente, tiene que estar tan limpio como cuando nos lo entregaron”. Los antepasados de Francisco de Borbón y Escasany han jugado un papel muy importante en la historia de nuestro país en el siglo XIX. El V duque de Sevilla, grande de España, preside actualmente empresas y fundaciones. Entre ellas la de la Orden Militar de San Lázaro de Jerusalén, donde hace unos años, paso el testigo de Gran Maestre a su hijo Francisco. Su tatarabuelo nació en Sevilla y fue el primer duque de Sevilla, y así ha ido pasando este maestrazgo de generación en generación. Le preguntamos que si el próximo heredero será su nieto, “el pequeño Fran” y nos contesta que si eligen será el sucesor, pero antes tiene que haber una elección. Todas las actividades caritativas a las que dedica su tiempo el duque de Sevilla, las realiza a través de la Orden de San Lázaro. La orden militar se ha dedicado durante muchos años a proyectos hospitalarios. “Sí, hemos construido casi 150 hospitales en China, América Latina y África. Pero ahora después de la pandemia con el hambre y necesidades que hay en el mundo hemos puesto en marcha nuestro propio Banco de Alimentos”, nos dice. El duque es un hombre muy activo. Licenciado en Económicas, preside IECSA, una empresa de equipos científicos. Y Neftan, una financiera internacional, con sede en Londres. Como el dice: “no paro”. Hace solo unos días en Madrid celebraron la reunión de nobleza asturiana y la condecoración del secretario de la OTAN.
El “gran hermano” del rey Juan Carlos
Hablamos con el duque de Sevilla de la crisis de la Nobleza y nos espeta que: “Desde que hay partidos de izquierda, se ataca a la nobleza en todos los sentidos, y la nobleza hace lo que puede. Juega un papel discreto salvaguardando las tradiciones familiares. Eso es lo que hace”. Dentro de esos ataques de los que habla de la izquierda, le preguntamos por la la situación del Rey emérito. Paco de Borbón lo tiene muy claro: “Juan Carlos de Borbón hizo por España lo que casi nadie ha hecho. Sería un gran error histórico que solo se le recordara por los últimos acontecimientos, cuando tanto contribuyó a que España se convirtiera en una democracia. No se puede juzgar al rey por los devaneos de ahora. Hay que valorarlo por el gran papel que hizo en la transición. El noble se queja de que “vivimos un autentico Gran Hermano. Antes hubiera sido diferente pero ahora estamos en el punto de mira para señalar cualquier desliz”.
En este tiempo de verano, el duque de Sevilla ejerce de perfecto abuelo. El noble está entusiasmado con sus nietos, Fran, Fernando y Flavia , esta ultima “la niña de sus ojos”, la única nieta que tiene un gran parecido en forma de ser, a la que fue su esposa Beatrice von Hardenberg, la duquesa de las ranas, todo un emblema en Marbella. El pasado mes de octubre fue la boda de su hijo Francisco con la austriaca Sophie Karoly y el duque expresa que: “estoy contento del matrimonio de mis hijos. Creo que Sophie, es una gran madre y Julián un hombre impecable y gran persona para mi hija Olivia”.