(Amparo de la Gama) Tienen sello propio y son los imprescindibles. Los santuarios de cita obligada donde dejarse ver y que te vean en Marbella. Lugares donde el mejor espectáculo, diversión y buena gastronomía, están asegurados. Son los que figuran como los templos de moda, a medio camino entre lo que fue la “jet” de antaño a lo más “Jipichic”, mezclando suntuosidad y modernidad para poner el broche de oro a la Marbella del “Canto sin dueño”.

Encuentros, les hace un recorrido por las apuestas más “chic” del momento, lugares por los que se pasean las celebritis como Eva Longoria en Nota Blu, 99 Sushi el favorito de Victoria y Cristina, las hijas de Julio Iglesias, Haaland, el jugador del Manchester City en Playa Padre, Ronaldo en Trocadero o el legendario Clubhouse de Marbella Club, cita obligada de la aristocracia mundial y donde estos días ha disfrutado Michael Jordan.

 

Casanis, los templos de Eva Longoria

 

Nota Blu es el templo de la marca Casanis, donde Eva Longoria se pierde cada vez que viene a Marbella. Un lugar icónico y con mucha historia en la ciudad ya que antes era la antigua Meridiana. Su nombre viene inspirado por la mítica blue note del jazz, y de este género musical. Inspiración que Zazou Belounis, propietario y CEO del restaurante ha usado para dar nombre a este espectacular concepto, donde se puede cenar y sin moverse del sitio terminar la noche en su Blu Bar, y deleitar el oído con su espectacular piano de cola en el cual cada noche, un pianista profesional toca las mejores partituras. En cuanto a la decoración todo es elegancia: El propósito de Nota Blu New Brasserie es convertir su espacio en un restaurante-museo con una rotación de obras de artistas de nivel internacional. Las obras de Joseph Kliblansky son solo un ejemplo de cómo Casanis Group, aporta a la ciudad de Marbella un interés cultural. Arquitectura conseguida, mármol, madera, líneas rectas y vanguardistas y una impresionante cocina vista de más de 100 metros cuadrados de cocina fría y 250 metros cuadrados de cocina caliente y cámaras que dejan ver a los maestros trabajando en las cocinas para sacar cada plato con la mejor presentación. La terraza, repleta de vegetación y obras de arte siempre está muy solicitada.  La sofisticación, la elegancia y el arte, son varios de los hilos conductores de esta nueva apuesta, que según la mismísima Eva Longoria: “activa todos los sentidos”. Todo basado en el buen servicio y la mejor gastronomía que son otros de los pilares fundamentales del restaurante. Y como una de las experiencias que se pueden disfrutar en Nota Blu New Brasserie es el “private dining”; la bodega privada, un lugar en el que más de 3000 botellas rodean a los clientes mientras disfrutan de un menú degustación con el mejor maridaje. Casanis Group que comienza en 2018, y extiende los locales de moda hasta el 2022 con su CEO el ex-futbolista Zazou Belounis, ha hecho de Marbella su casa. Y así inaugura un lugar de cita obligada para los tardeos. El “Sunset” de moda en Marbella cada domingo se convierte en un magnifico ritual. Es en La Plage Casanis. Y es obligado comerse un buen arroz con bogavante en su restaurante donde el servicio es el más amable de la costa y después degustar los cocteles del chef, mientras en sol cae en un atardecer que ya es todo un espectáculo. Y para los más noctámbulos está Mamzel que abrió su espacio en la antiguo Finca Besaya y donde se puede disfrutar gastronomía con fusión, pero siempre enfocada al mediterráneo, mientras en el escenario de su teatro puedes ver el más exótico de los espectáculos.

 

Trocadero el buque insignia del lujo de “Dioni”

Trocadero es por si solo ya sinónimo de lujo y de cita obligada en la ciudad. Hay un dicho que circula por todos los cenáculos, que ya se toma como referente: “Quien viene a Marbella y no pisa Trocadero, es como si no hubiera estado en Marbella”.  Trocadero es toda una apuesta por sus beach, su gastronomía y como no, también por el turismo cultural que mueve. Este buque insignia de la restauración y clubs de lujo de playa en la Costa del Sol, puesto en marcha por Dionisio Hernández Gil, donde el futbolista Ronaldo no se pierde un arroz, reúne a lo más “cultureta” de la ciudad en sus foros de “Encuentros con la Cultura”, uno de los últimos que ha pasado por allí, es el duque de Sevilla Francisco de Borbón o el aristócrata José María Finat para presentar su último libro. Por este foro han desfilado  escritores de la talla de Zoe Valdés, Vanessa Monfort, Marta Robles, Pilar Eyre, o Javier Sadaba.  El complejo, situado en la playa de Río Real, tiene una de las ambientaciones y decoraciones más destacadas de tema africanos. Su innovadora terraza a pie de playa, ofrece conciertos de música cubana al lado del restaurante. El santuario Trocadero, tiene varios espacios: está la parte interior, más acogedor, con reservados y recomendable para eventos privados, y el exterior, para almuerzos y cenas, con hamacas y tumbonas y servicios completos de comida y bebida. En lo que respecta a la oferta gastronómica del establecimiento, en Trocadero Arena se apuesta por una cocina de producto esencialmente mediterránea y con una importante influencia asiática. Los arroces, se fusionan en la carta con la cocina japonesa. Y para el atardecer, la sección de coctelería, con los mejores mojitos mientras se el sol cae en la costa africana.

 

Playa Padre el refugio de Haaland

Playa Padre ha supuesto un antes y un después en el verano marbellí. Su innovadora propuesta y su apuesta por diferenciarse de los tradicionales chiringuitos y beach clubs de las costas españolas, Playa Padre ha elevado este concepto, convirtiéndose en un atractivo para turistas nacionales e internacionales, celebrities e influencers de todo el mundo. Uno de sus asiduos es Haaland, el jugador del Manchester City. Su exquisita decoración convierte este beach club en un oasis en el que el tiempo se detiene, donde solo importa el aquí y el ahora. Palmeras, arena blanca y el agua azul crean un paisaje idílico en el que relajarse y disfrutar, no solo del sol y el mar, sino de deliciosos cócteles y la mejor música del momento, gracias a un panel de DJs internacionales que ayudan a crear esa atmósfera inigualable que ha convertido a Playa Padre en el place to be. Todo ello unido a una cocina con una personalidad propia, alejándose aún más de la concepción generalizada de comida de chiringuito, ofreciendo platos en los que la cocina mediterránea se fusiona con las tendencias globales, presentando una carta sabrosa, con ingredientes de kilómetro cero y elaboraciones internacionales. Los domingos está el plato estrella. Los tardeos boho en un ambiente exclusivo, con fiestas electrónicas donde recala público de toda la costa andaluza. El Grupo Mosh,  o mima, por encima de otras consideraciones, todo lo que es música. Y los domingos la Playa del Cable se convierte en toda una fiesta.

 

99 Sushi Bar, refugio de Vic Y Cris, las hijas de Julio Iglesias

El grupo Bambú, referente en gastronomía japonesa en España, aterrizo con su marca 99 Sushi Bar al hotel Anantara Villa Padierna, desde entonces se cuelga  a diario el cartel de “completo” por su exclusividad. Hay que pedir cita con bastante antelación para ocupar una de sus mesas, entre las que podemos encontrar cenando desde a las mellizas de Julio Iglesias, Vic y Cristina o Tamara Falco. El local cuenta con un interiorismo que aúna el refinamiento del clasicismo inglés combinado piezas exóticas de diversas procedencias, donde priman jarrones, tapices y obras de arte, con elementos de inspiración oriental.  La propuesta culinaria de 99 Sushi Bar despliega un menú con los sabores auténticos de la cocina de fusión japonesa, basada en su filosofía por el respeto al producto y el uso de las técnicas tradicionales. Bajo la dirección de los chefs ejecutivos, Ángel Sánchez, hallamos creaciones propias de platos ya icónicos como la tempura de langostino tigre en una salsa cremosa picante, el bacalao negro de Alaska, gratinado con dos capas de misorojo; el tartar de atún Kimuchi y ensalada de encurtidos en salsa de col china picante fermentado, algas wakame y patata paja; las gyozas de jabalí con cebolla caramelizada, queso de Arzúa y castaña pilonga; o el taco de toro braseado y panceta con emulsión de tomate chile y hierbas aromáticas. Sin olvidarnos de descubrir los intensos bocados de los maki, como el de bogavante en sake con algas wakame, pepino y yuzu; y también de los nigiris,con una amplia selección en la que encontramos el de toro flambeado con tomate, el de anchoa de Santoña y sardina o el de rodaballo flambeado con aceite de cilantro y momiji oroshi. El restaurante cuenta también con un reservado que se puede privatizar y es idóneo para grupos de hasta ocho personas. El restaurante tiene un salón principal con capacidad para 45 personas, una barra de sushi, realizada en granito, en la que se puede ver en directo los movimientos del ‘sushiman’ uno de los atractivos máximos. Después uno debe dejarse ver por su terraza y ‘lounge bar’ donde te codeas con lo más “chic” de la Costa del Sol.

 

El “Clubhouse” de Marbella Club: de Michael Jordan al Conde Rudy

 

El concepto del “Clubhouse” del mítico Marbella Club convertido en un punto de encuentro en el que compartir experiencias gastronómicas, de ocio y compras con acento local es toda una apuesta atemporal y multigeneracional que abarca una serie de espacios, diseñado para disfrutar de los buenos momentos. El último en disfrutar este concepto ha sido Michael Jordan que ha elogiado este santuario como “muy bello”. Con una decoración pensada para el relax por las interioristas Marie-Caroline Willms y Johanna Haniel, que evoca el ambiente tranquilo y relajado de un pueblo andaluz, pero con un toque sofisticado. Materiales naturales como el bambú o la terracota se entremezclan minuciosamente con detalles de cerámica artesanal o papel pintado de la casa Schumacher. El Clubhouse ofrece experiencias con regusto mediterráneo en todas y cada una de sus estancias clave: el restaurante El Patio, Rudi’s, La Bodega y un acogedor patio central con espacios variados. El restaurante El Patio, está abierto durante todo el día, para tomar un zumo, un tapeo, o un almuerzo debajo de las buganvillas. Durante el día su patio central, ofrece en su oasis un lugar donde tomar cafés ricos y batidos sutiles, almuerzos tranquilos y deliciosos cócteles, que se convierten en los perfectos acompañantes del Tardeo. Mientras que por la noche cobra vida bajo cientos de luces parpadeantes, y una sorprendente barbacoa al aire libre y música en vivo, perfecto para ponerse al día con amigos en una cena con platos para compartir o un tentador cóctel. La música y el baile después de la cena son otro de los importantes reclamos. Y el que no quiere bailar se refugia en el Rudi’s bar es un acogedor y bohemio refugio n el que jugar una partida de backgammon o escuchar música en vivo junto a la chimenea con un cóctel en la mano. Un guiño total al Conde Rudi von Schönburg, el primer director general del hotel, quien, que el mismo a sus ochenta y muchos años sigue allí echando sus partiditas.  Rudi’s ha sido diseñado para evocar la sensación de una sala de estar familiar, con obras de arte inspiradas en la Alhambra y taburetes con borlas al más puro estilo andaluz, Y para los “intolerantes y amantes de la comida sana” está dentro del concepto Clubhouse, el restaurante pop-up El Olivar, en el que el chef Andrés Ruiz desarrolla una cocina saludable basada. El Grill, donde el maestro parrillero Roque Juárez Junior ofrece las recetas clásicas de su familia en la misma parrilla de bronce en la que trabajó Roque Juárez, su padre y predecesor es el clásico de los clásicos en el producto de temporada de la zona. Sin olvidar al final de la noche poner el broche en el legendario concepto del Summer Bar, que sigue poniendo la clave de sol a las noches marbellís, desde los años cincuenta con su piano y donde es fácil encontrarse a muchos aristócratas añorando la “Marbella del Canto sin dueño”,