(Amparo de la Gama) El empresario Ricardo Arranz recibe en novimebre el premio de la E de Encuentros con la Cultura tras haber ha cumplido el sueño de la condesa Alicia Villapadierna, que falleció con el ideal de ver construido, en los terrenos de la familia, el proyecto estrella que diseñó a lo largo de su vida: el Four Seasons. El hotel que toma cuerpo ya, empezara a construirse a principios de año. El viudo de la noble, está feliz de haber podio cumplir su palabra. En una entrevista mantenida con Encuentros, nos precisa: “Era una de las ilusiones de Alicia, uno de los proyectos en los que más trabajó antes de que el cáncer le arrebatara la vida. Alicia sigue siendo la mejor embajadora de Marbella. Este proyecto fue su obra y su trabajo día a día y codo con codo conmigo. Ahora se edificará y será un gran logro para esta ciudad”. El complejo constara de 120 habitaciones y 200 villas de lujo. Todos los resorts de tipo Four Seasons o Mandarín Oriental, son el buque insignia del lujo en el mundo, y es un producto hotelero rodeado de otro inmobiliario. “Con ello, vamos a implantar los tres productos americanos de residentes, que son los apartamentos dentro del hotel y que solamente se utilizan un mes al año; los private residences, que son apartamentos en los que se da todo tipo de servicios del hotel y si lo quieres alquilar lo alquilas; y las villas de lujo. Marbella Marbella necesita de las grandes marcas de lujo para consolidar este mercado”. A Ricardo todavía le sigue sorprendiendo la tenacidad que caracterizó a su mujer a lo largo de su vida. En la entrevista con él, revive el día que le dijo Alicia: “En este ‘pedregal’ vamos a construir un resort exclusivo con tres campos de golf”. Ella, tal y como la recuerda su esposo, siempre fue la mejor visionaria. Ahora Four Seasons, el resort hecho para los bolsillos más pudientes, guardará la caja de madera que Ricardo llevaba en sus manos con la Virgen de Guadalupe de su esposa, el día que coloco la primera piedra, como seña de identidad de lo que será el complejo hotelero.
El viudo de oro y las mellizas de Julio Iglesias
Ricardo Arranz es consciente de que es el viudo millonario más cotizado de la Costa del Sol. No hay día que pase, sin recordar a Alicia. “Ahora que vuelven a inaugurar en Marbella, La Fonda, el mítico local de Horcher, donde conocí a la que sería mi esposa, se te remueven muchas cosas. Allí estaba ella, tan guapa, al lado de su amiga y eso marco para mí un antes y un después en mi vida”. Alicia fue capaz de transformas a este “soltero de oro” que hasta entonces no había sentado cabeza “Ahora nuestros cuatro hijos son su vivo retrato. A su lado trabajan los dos mayores: «Alicia me los dejó de ayudantes y son niños estupendos, que siempre están pendientes de mí. Alejandro y Felipe llevan ya un tiempo dedicándose a esto y ahora Ricardo, que acaba de terminar su carrera de económica en Alemania va a trabajar en el tema del Four Sesons en Miami. Son niños muy alienados en esta profesión. Nosotros somos urbanizadores inmobiliarios y en eso quieran que sigan”. Ricardo, recuerda la época mítica de Marbella: “ahora me veo películas de Sean Connery para recordar mis tiempos con él jugando en Aloha al golf. Tan buenos tiempos que pasamos. Y digo como dice mi amigo Julio Iglesias, “Vivir la vida”. A él le encanta Marbella. Esta vez no le pude ver en su visita, pero veo mucho a sus hijas. A las mellizas les gusta mucho la comida japonesa y vienen aquí al Sushi 99 de Villapadierna.
Tamara Falco, Onieva y Barack Obama
Por su hotel no dejan de pasar celebritis. Quizás en el último hotel donde se hospedaron Tamara Falco e Iñigo Onieva, fue en su establecimiento hace unos meses, “Aquí estuvieron y muy animados, jeje. Estuve con ellos. Ha sido un golpe tremendo lo que les ha pasado. El estar en una exposición pública, está dañando sus decisiones. Ella como religiosa que es, ha dicho que está dispuesta a perdonar, pero al aparecer en los medios no va a ser nada fácil. Yo era muy amigo de su padre el marque de Griñón, todo un señor”. La visita de la ex primera dama Michel Obama, marco un antes y un después en el Villapadierna: “Ahora cuando ha estado el ex presidente Obama en Málaga había reservado aquí en mi hotel para hospedarse, pero al final cambiaron los planes. Cuando su mujer vino era la primera vez que elegía España como vacaciones de los presidentes. Marco un hito”.
“No solo playa para el cliente, quiero cultura”
Uno de los dichos de este empresario, nada al uso, es: “No quiero que los clientes de mi hotel tengan solo playa y sol, deseo que también disfruten de la cultura”. Y de esa manera ha entendido el turismo cultural este embajador que ahora recibe el premio de la “E” de Encuentros con la Cultura en noviembre por toda su labor en la Costa del Sol con un original diseño de la retratista Rita Martorell: “Me hace mucha ilusión este reconocimiento. La cultura es mi vicio. Desde hace tiempo me relacionaba en Marbella con Salamini y aprendí mucho de él y me fui interesando por el mundo cultural del arte. Lo de construir lo pienso siempre en el orden de hacer algo diferente. Pensar que tengo más de 1800 obras de arte este hotel me agrada mucho. Por ejemplo, tener la mesa donde se firmó la Constitución del 1812 es toda una leyenda y me complace que este en mi balneario de Carratraca”. Por los encuentros culturales del Villapadierna, han pasado personajes que van desde Ouka Lele, el ministro Manuel Pimentel, Cesar Pérez de Tudela, Ángeles Caso, José Manuel Soto, Nuria Amat o Juan Manuel de Prada.